PERSEVERNCIA

jueves, 2 de julio de 2015

LA PERSEVERANCIA

LA PERSEVERANCIA



PERSEVERANCIA. (Del latín perseverancia.) f. acción y efecto de perseverar. 2. Constancia en la virtud y en mantener la gracia hasta la muerte.

PERSEVERAR. (Del latín perseverare.) intr. Mantenerse constante en la prosecución de lo comenzado, en una actitud ó en una opción. 2. Durar permanentemente ó por largo tiempo.

"Tomado de Diccionario de la Lengua Española. Real Academia Española".


Los perseverantes son.....pacientes, disciplinados, decididos, valientes, responsables.

Los inconstantes son.....faltos de voluntad, caprichosos, impacientes, indecisos, mediocres.

«LA PERSEVERANCIA»

La perseverancia es el aliento ó la fuerza interior que nos permite llevar a buen término las cosas que emprendemos sabiamente en el transcurso de nuestro caminar.

Los que son perseverantes tienen una alta motivación y un profundo sentido del compromiso que les impide abandonar las tareas que comienzan, y los animan a trabajar hasta el final.

Para ser perseverantes es una gran ayuda ser también disciplinados, y a la vez decididos en todas sus acciones.

La perseverancia es una cualidad común a las personas de carácter sólido, muchas de ellas líderes en su campo de acción, que lejos de amilanarse frente a las dificultades ó a la adversidad, se engrandecen y redoblan sus esfuerzos, con una gran determinación, para conseguir los objetivos reales que se han fijado.

Si creemos en lo que hacemos y nos armamos de paciencia para sortear los obstáculos que se nos presentan en el camino, si no perdemos de vista nuestras metas turistas, y a la vez luchamos contra el cansancio ó el desánimo, sentiremos en nuestros ser una incomparable satisfacción, cuando tengamos ante nosotros el fruto de nuestro esfuerzo humano.

«PARA SER PERSEVERANTES»

o) Ejercitemos diariamente nuestra fuerza de voluntad luchando todos los días contra la pereza, la negligencia y el descuido.

o) Formemos en los niños y niñas con una gran disciplina para que pueden persistir en sus deseos, les dé fortaleza de carácter para que no se derrumben frente a los obstáculos, y una buena dosis de caridad que les permita comprender que en un mundo donde la competencia es tan grande y agresiva, y en la cual sólo tienen éxito quienes más se preparan y más persistencia tienen en sus objetivos.

«LA INCONSISTENCIA»

La inconsistencia está muy asociada a la falta de claridad de metas específicas, y a la capacidad de terminar las cosas que se empiezan.

Las personas inconsistentes no asumen con la debida seriedad sus compromisos, y suelen fácilmente abandonar a mitad del camino ó recién comenzadas las actividades que emprenden.

Su fuerza de voluntad es muy escasa, y se dejan llevar con suma facilidad por sus estados de ánimo.

Las dudas, las vacilaciones, los titubeos, los aplazamientos son características de su manera de trabajar, y en la mayoría de los casos echan a perder sus esfuerzos.

Para culminar debidamente un trabajo es necesario hacer acopio de paciencia, constancia y a la vez determinación, de los cuales carecen las personas inconsistentes, quienes rara vez sienten la profunda satisfacción de la labor cumplida a caballada, y terminan perdiéndose en la frustración ó la mediocridad.

CONCEPTO DE PERSEVERANCIA



DEFINICIÓN DEPERSEVERANCIA


Del latín perseverantia, la perseverancia es la acción y efecto de perseverar. Este verbo hace referencia a mantenerse constante en un proyecto ya comenzado, una actitud o una opinión, aún cuando las circunstancias sean adversas o los objetivos no puedan ser cumplidos. Perseverar también es durar por largo tiempo.
Como es sabido, la perseverancia es la clave del éxito en la mayoría de los prendimientos, y puede aplicarse a campos tan diversos como el trabajo físico, el estudio y las relaciones amorosas. En todos los casos, se debe tener un objetivo claro, una meta que justifique el esfuerzo y la dedicación en un período de tiempo generalmente extenso.
A lo largo del camino hacia el cumplimiento de dicho objetivo, la frustración es uno de los peores enemigos de todo emprendedor; para evitar autoconvencerse de que no vale la pena continuar luchando, es esencial estar preparado para los intentos fallidos, que son tan naturales como los triunfos.
Justamente en saber aceptar los propios fracasos como parte integral de la vida y convertirlos en recursos reside el secreto de la victoria. Tomando como ejemplo el estudio de un idioma extranjero, se suele creer que quienes comienzan de pequeños aprenden mejor que los adultos, y que tienen un menor índice de deserción. La explicación más común para dicho fenómeno gira en torno a la edad, alegando que cuanto más joven es una persona, más predispuesta se encuentra a incorporar una nueva estructura lingüística.
Sin embargo, adoptando una visión más constructiva, podemos asumir que quienes se embarcan en un estudio en su madurez suelen cometen un error que los niños, no. Este elemento contraproducente es el miedo, y se origina en un constante análisis de las probabilidades de fracaso, de la falta de tiempo o de lucidez, en pensar si vale la pena invertir tiempo y dinero en una actividad que, quizás, sea demasiado para nosotros. Los niños, en cambio, suelen encarar el aprendizaje de una manera más pasiva; no necesitan buscar el conocimiento, ya que éste llega a ellos.
PerseveranciaLa perseverancia aparece en los peores momentos, justo cuando todo parece desmoronarse frente a nuestros ojos; su recompensa, por otro lado, es directamente proporcional a la angustia y la desolación que sentimos antes de adoptarla comoactitud para nuestras batallas.
En las relaciones interpersonales, los roces y el desencantamiento son dos elementos inevitables; los años de convivencia sacan a la luz diversas características negativas de las personas que no se evidencian mientras existe una cierta distancia. Muchas veces, ante el descubrimiento de los defectos ajenos, el interés por formar parte de una pareja o de un grupo de amigos decrece; cuando llega este punto crucial de un lazo afectivo, se presentan tres caminos bien diferenciados: el corte de la relación; la negación del problema, que acarrea malestar y frustración; la perseverancia.
Dado que no existe relación posible entre dos personas en la cual no haya conflictos, tampoco existe relación que no requiera de la perseverancia para desarrollarse sanamente. Acercarnos a otros seres vivos y a nosotros mismos representa uno de los mayores desafíos de la humanidad, así como una de las experiencias más enriquecedoras que podemos vivir en esta Tierra y, como todas las grandes oportunidades, exige un gran esfuerzo de nuestra parte.
Es esencial tener claro que no se puede alcanzar el éxito si se transita indefinidamente un camino que nos haya conducido al fracaso. En otras palabras, perseverar no consiste en intentar lo mismo una y otra vez, sino en mejorar los métodos, en probar cosas diferentes, sin miedo a tener que comenzar nuevamente.
Por último, es de popular conocimiento la frase “persevera y triunfarás”, supuestamente creada por el filósofo romano llamado Lucio Anneo Séneca, que nació en el año 4 a. C..



Perseverancia

                                       
                                                    PERSEVERANCIA
El término perseverancia proviene del latín perseverancia, que significa constancia, persistencia, firmeza, dedicación o tesón, tanto en las ideas, como en las actitudes, en la realización de algo, en la ejecución de los propósitos y también en las resoluciones del ánimo. La perseverancia también se refiere a una duración permanente o continua.
La perseverancia es la capacidad para continuar y seguir adelante a pesar de las dificultades, los obstáculos, la frustración, el desánimo, el aburrimiento, o la tendencia o los deseos de rendirse o abandonar ante una situación. Por lo tanto, una persona perseverante persigue sus objetivos con tesón, es dedicada, acaba lo que ha empezado, se mantiene concentrada y trabajando en su tarea con constancia, y si fracasa vuelve a intentarlo mejorando el método. Por lo general, son optimistas y con un estado de ánimo positivo, tienen una alta autoestima y una alta capacidad de auto control.
En cualquier circunstancia de la vida, se debe tener un objetivo claro o una meta que justifique el esfuerzo y perseverancia o dedicación en un período de tiempo generalmente extenso. Por eso, se dice que la perseverancia es la clave del éxito en muchas situaciones, aunque se debería decir que la clave del éxito es saber cuándo perseverar y cuándo no. Porque, por otro lado, perseverar puede ser negativo, ya que se puede gastar mucho esfuerzo y tiempo en algo que no produce ni va a producir ningún resultado. Por tanto, una persona debe saber no sólo cuándo perseverar, sino también hasta qué punto y cuándo es más inteligente abandonar y centrar nuestros esfuerzos en algo diferente.
La perseverancia también es importante y forma parte del desarrollo de la persona y de las relaciones interpersonales, ya que en toda relación entre dos personas alguna vez hay conflicto y es necesario un gran esfuerzo para resolver esos conflictos, no tener miedo al fracaso o a los errores, y tener un control de los problemas y superarlos para mejorar, crecer personalmente y continuar viviendo.
La perseverancia ayuda, pero no garantiza, o aumenta la probabilidad para alcanzar metas difíciles, y ayuda a valorar más los logros obtenidos. También la perseverancia aumenta la sensación de auto-eficacia cuando tienes éxito, y ayuda a mejorar las capacidades y las habilidades, a desarrollar nuevas técnicas para superar los obstáculos y a aprender de los errores.